10 de febrero de 2011

Riesgo de aludes

Lo señalábamos en una de las últimas retransmisiones de Popular TV. Los dos equipos cántabros inmersos en la pugna por la permanencia en la Liga EBA (el Pas Piélagos y el SAB Torrelavega) tienen que estar muy atentos a la resolución de la temporada en la categoría inmediatamente superior. Las bases de competición establecen que los conjuntos clasificados de los puestos 10º al 12º caen a la Primera División, pero también añaden: en caso de que fuera necesario, por descensos de equipos de LEB Plata, descenderán además de los seis equipos ya citados, tantos como fuera necesario para garantizar seis ascensos.

Esto significa que el descenso de una escuadra de la Liga LEB Plata de cualquiera de las comunidades autónomas de la conferencia norte (Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Euskaki, Navarra y La Rioja) provocaría un efecto de arrastre en nuestro grupo de la Liga EBA. El descenso pondría en riesgo a los dos equipos clasificados en el 9º puesto: el del subgrupo A-A (el cántabro) y el del subgrupo A-B (el gallego), un hecho que daría una enorme trascendencia a la eliminatoria que ambos jugarán al cierre de campaña.


La buena noticia es que esta temporada solo desciende uno de los 15 equipos que componen la Liga LEB Plata. La mala es que hay hasta seis conjuntos norteños en esa categoría, y que cinco de ellos se encuentran en este momento en plena lucha por la supervivencia; el Oviedo CB (Asturias) y el Óbila CB (Castilla y León) poseen un colchón de dos triunfos sobre la zona de descenso, mientras que el Iraurgi SB (Euskadi), el Básquet Coruña (Galicia) y el CB Santurtzi (Euskadi) apenas tienen margen de una victoria.

Naturalmente, todas estas hipótesis se sostienen sobre la premisa (ciertamente irreal) de que son los méritos y deméritos deportivos los que determinan en qué categoría compite cada cual. Sin embargo, como cada verano, las renuncias, las vacantes y el intercambio de plazas se encargarán de dibujar un panorama bien diferente. En cualquier caso, conviene ser precavido, no sea que el 17 de abril (fecha en la que concluyen ambas competiciones) haya que arrepentirse. Ya lo dice el dicho: hombre precavido vale por dos.


MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org