igual nos enteramos. 72 horas después de la celebración de la Asamblea de la FEB, seguimos sin noticias de los sistemas de competición para la próxima campaña. La nota de prensa de la federación apenas entra en el asunto y se limita a exponer los cupos que se implantarán en las categorías federativas. Ni los medios generalistas, que han copiado íntegramente el comunicado (tal cual), ni la prensa especializada se han interesado por ello, un hecho que sume a los aficionados al baloncesto en la más absoluta orfandad informativa.
Como indicábamos, la mayor parte de los titulares se ha centrado en la aprobación del nuevo sistema de cupos. En febrero de este mismo año, la Comisión Europea declaraba ilegales los existentes, ya que consideraba que atentaban contra la libre circulación de trabajadores. Los especialistas consideraban que el dictamen suponía la muerte efectiva del sistema de cupos, pero no para la FEB, que unas semanas más tarde ha contraatacado con un nuevo redactado: antes exigía seleccionables, ahora exige jugadores de formación.
Según el diccionario de la FEB, los jugadores de formación son todos aquellos que entre su primer año cadete y el primero como senior, entre los 15 y 19 años, e independientemente de su nacionalidad (nótese la trampa) hayan estado inscritos con cualquier club afiliado a la FEB en un periodo continuado o no de tres temporadas. Es decir, que donde antes no podían trabajar doce holandeses cualesquiera, ahora tampoco. No parece demasiado coherente que la federación de los valores busque subterfugios para saltarse la legalidad.
La FEB también presume (recuérdese el refrán) de haber destinado el 30% de su presupuesto al baloncesto femenino. El botín debió perderse en las primeras estribaciones de la Cordillera Cantábrica, porque a tierras cántabras parece que no ha llegado (¿será culpa de la famosa catenaria de Reinosa?). Por otra parte, resulta irónico que el presidente de la FEB hable del Proyecto Mujer ante un auditorio, se supone que representativo del baloncesto español, masculino al 95% (atentos al video: tres mujeres en nueve minutos):
Como colofón, la Asamblea aprobó una proposición para impedir que los jugadores de segundo año acudan a los campeonatos de España de selecciones autonómicas. La medida, que entrará en vigor a partir de la 2012-2013, se ha tomado para evitar la saturación que sufren los jugadores. Como todo el mundo sabe, no hay cosa que más sature a un jugador de baloncesto que jugar al baloncesto. Es más, si pudiera practicar otro deporte, no dudaría en hacerlo. Seguro que en Navidad y Semana Santa ninguno de ellos coge un balón.
MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org
