En uno de los veranos más prolíficos para el baloncesto español, cinco selecciones nacionales se han subido al podium en los distintos campeonatos internacionales. Por mera probabilidad estadística, hubiera sido lógico, hasta cierto punto, que algún jugador cántabro se hubiera colgado una medalla al cuello; pero ese no ha sido el caso. He aquí un hombre, David García Peña, de rabiosa actualidad tras su fichaje por el Pas Piélagos, que sí consiguió enfundarse la elástica nacional, y que además lo hizo formando parte de la generación más exitosa en la historia de nuestro deporte. La imagen data del 16 de julio de 1997.
Imagen | Iván Peláez Herreros | El Diario Montañés
