El derbi se tiñó de azul | 17 de diciembre de 2005
Con un extraordinario ambiente en las gradas, Merkamueble y Bulevar Altamira SAB se citaban sobre la cancha del Vicente Trueba para resolver su primer enfrentamiento en competición oficial. Con ambos equipos instalados en la parte alta de la clasificación y el morbo de un derbi, la cita prometía espectáculo del bueno. Los visitantes se presentaron al partido afectados por una apocalíptica plaga de bajas. A las previsibles de Diego Ovejero y Amado Gutiérrez hubo que añadir la de Jerónimo López. Con ese panorama, el técnico Jorge Trueba se vio obligado a afrontar la cita con apenas ocho jugadores seniors.
Los primeros minutos del partido parecían indicar que el partido sería igualado. Un gran arranque de Manuel Álvarez, imparable en las proximidades del aro, le daba al Bulevar Altamira sus primeras y cortas ventajas en el partido (5-7). A partir de entonces, el aro de su rival empezó a encoger hasta límites insospechados. Merkamueble apretó las clavijas defensivas y aprovechó la oportunidad para golpear con sus veloces contraataques, el panorama idóneo para el base local Alberto Ruiz.
Mucha tensión
Sellada la primera gran ventaja en el marcador (23-13), una gran nebulosa penetró en el parket torrelaveguense para oscurecer la ideas de los dos contendientes. Los nervios hicieron acto de aparición: los azules anotaron su primer punto en el minuto cinco del periodo, pero el SAB no supo aprovechar su sequía anotadora, porque en ese tiempo tan sólo fue capaz de anotar dos canastas (23-17). Al descanso la diferencia había sido reestablecida (31-21).
El partido se desarrollaba según las previsiones apuntadas, con Bulevar Altamira SAB viviendo de la aportación de sus jugadores interiores y con el Merkamueble echando mano de sus exteriores. Lo que no entraba en el guión era la emergente aparición de un actor secundario con papel protagonista: Luis Fernández. Con sus espectaculares ganchos y sus movimientos de aproximación, los locales mantuvieron su ventaja en el electrónico hasta la llegada del último periodo (42-34).
Visto el mal cariz que tomaba el partido para su equipo, el técnico viisitante optó por mover ficha y subir la presión de sus jugadores a toda cancha. El resultado no pudo ser más positivo: el SAB ahogó las ideas de un rival que empezó a acusar los nervios y enchufó varios contraataques consecutivos. A tres minutos para el final, la emoción hizo acto de aparición con la igualada en el marcador (50-50).
Final de infarto
Y quien más acusó el estado de nerviosismo fue Octavio Marcos: con uno abajo en el último minuto, marró dos tiros libres que parecían decisivos, pero supo saldar el error de manera inmediata con un robo tras un monumental error visitante (55-54). El jugador azul dispuso de una nueva doble oportunidad desde la personal, pero sólo convirtió uno. En la acción final, David Saiz cometió una falta innecesaria sobre Manuel Álvarez con ambos en el suelo y sobre la bocina. Por las arterias del jugador rojo no corría sangre, sino horchata: chof-chof y a la prórroga (56-56).
En el tiempo extra, un afortunado lanzamiento triple de David Díaz, tras rebotar un metro por encima del aro, terminaba por minar la numantina resistencia visitante (60-56). SAB acabó por enterrar todas sus opciones con la eliminación de la estrella del partido, Manuel Álvarez (25 puntos), en la acción siguiente. Merkamueble había asegurado la victoria. En abril llegará el segundo capítulo del derbi.
Merkamueble 67-62 Bulevar Altamira SAB
Parciales: 23-13, 31-21, 42-34, 56-56 y 67-62 (OT)
Merkamueble: Ramón Reigadas (0), Saúl Ceballos (5), Daniel Allende (1), David Díaz (11), Rafael Sainz (8), Adrián Garallar (0), Alberto Ruiz (14), Luis Fernández (19), Octavio Marcos (6) y David Saiz (3).
Bulevar Altamira SAB: Chicho Revuelta (2), Mario Acebal (3), Chuchi Gómez (0), Pablo Colino (3), Rubén Santos (10), Dani García (7), Manu Álvarez (25) y Pablo Hedesa (12). Pabellón Municipal Vicente Trueba.
