Primera parte olvidar o recordar: si un equipo pretende salir victorioso de un encuentro, la mejor forma de encarrilar su objetivo no parece ser anotar cinco puntos en el primer periodo. La defensa en zona de los morados y el escaso acierto en el lanzamiento de los pielaguistas hizo posible que al final del primer periodo Seprinsa Cantbasket llegara con el margen de una decena de puntos (15-5). Con un Andrés Pariente en estado de gracia, la renta de los juniors santanderinos llegó a duplicarse hasta poco antes del descanso (37-17), momento a partir del cual se produjo la reacción del equipo organizador.
Administrando el resuello: los jóvenes renedanos se pusieron manos a la obra para tratar de levantar el partido. Mientras, los discípulos de Chus Herrero se encomendaron una labor muy distinta, la de administrar su diferencia. El conjunto morado fue ralentizando sus ofensivas a medida que avanzaba el encuentro, consciente de que el tiempo corría a su favor. Los segundos transcurrían y, a pesar de que la EM Piélagos iba acercándose en el electrónico, su desventaja había llegado a ser tan abultada que decrecía muy lentamente. Los anfitriones no se rindieron y acabaron entrando en los últimos instantes con posibilidades (escasas).
Sin canasta sobre la bocina: en los últimos instantes los nervios hicieron acto de presencia. Por momentos, la presión de los anfitriones propiciaba errores letales en sus adversarios y les colocaba a tiro de piedra en el marcador. Al final, con un segundo escaso por jugarse y tres arriba en el marcador (57-54), la suerte pareció tornarse del lado de los renedanos: la AD Cantbasket disponía de dos tiros libres y, no solo erró ambos, sino que además cometió una infracción por invasión en el segundo. Todo esto daba la posibilidad de solicitar un tiempo muerto que ofrecía una última oportunidad para conseguir el empate y forzar la prórroga. De la pizarra de David Fernández salió una jugada que dejó solo a Iván Saiz para ejecutar el triple que les hubiera llevado al tiempo extra, pero el tiro no hizo diana, desvaneciéndose así la posibilidad de concluir la remontada. Fotografía | AD Cantbasket
IVÁN PELÁEZ HERREROS | Entrenador de baloncesto
