La lucha por la permanencia en la Liga EBA está más viva que nunca. Los equipos inmersos en la parte sur de la tabla clasificatoria se resisten a ser pasto de las llamas del infierno. La entidad de los rivales es una anécdota comparada con su instinto de supervivencia. Los cuatro últimos clasificados se han rebelado este fin de semana al orden establecido y han puesto la liga patas arriba. La salvación está más cara que nunca pero, no lo olvidemos, alguien tiene que salvarse. Y ahí es donde entra en juego la cita de Machado.
Quedan tres jornadas para que se baje el telón y hay seis equipos (la mitad de la liga) inmersos en plena batalla por eludir los tres puestos de descenso. El Easo Arruabarrena y el Deportes Ferrer (8-11) parten con al menos una victoria de ventaja sobre sus perseguidores, pero no deberían confiarse. Los logroñeses cuentan con el calendario más comprometido (Universidad de Valladolid, Cafés Aitona y SAB Torrelavega) y los donostiarras acumulan cuatro jornadas a la expectativa del ansiado noveno triunfo (esos nervios).
Descendemos un escalón
A la sombra de ambos se encuentran el Miguel Robleda y el UPV de Álava (7-12). Los burgaleses disponen de dos partidos consecutivos en su propio feudo, ante un herido CD Estela y un emergente Aloña Mendi; en la última jornada, el Universidad de Valladolid llegará al duelo de rivalidad regional sin mayores motivaciones. Por su parte, los alaveses se la jugarán este domingo en casa ante el colista de la liga (Aloña Mendi), para acabar el campeonato ante el Zornotza Saskibaloi (que nada se juega) y el Easo Arruabarrena.
No han acompañado los resultados, pero el gran triunfo frente al Universidad de Valladolid le ha proporcionado una inyección de moral a Merkamueble (6-13). El principal escollo para los amarillos se llama Cafés Aitona, el equipo más en forma de la competición y su próximo rival. Si todo marcha según lo previsto, siete días después recibirá a un SAB Torrelavega con el billete para la fase de ascenso y, siete más tarde, viajará a Renedo para medirse a otro equipo sin mayores aspiraciones deportivas.
Pitágoras no miente
Las posibilidades matemáticas son infinitas, aunque las simplificaremos: con una victoria, el equipo mueblero desciende a Primera División (no habría vuelta de hoja), con dos mantendría opciones reales de permanencia si le acompañan los resultados de sus rivales directos y con tres solo una combinación funesta de adversidades le privaría de la salvación. Gana el basket average al Easo Arruabarrena (+1), al Deportes Ferrer (+15) y al UPV de Álava (+2), pero lo pierde con Miguel Robleda (-3) y Aloña Mendi (-11).
Tampoco debería perderse de vista la posibilidad de que se produzcan empates múltiples. El equipo amarillo saldría beneficiado de dos triples empates: con Deportes Ferrer+UPV de Álava y Deportes Ferrer+Miguel Robleda sería primero; no tendría la misma suerte con Miguel Robleda+UPV de Álava, en el que acabaría segundo. Si hay alguien dispuesto a hacer budú, el candidato número uno sería el equipo riojano. Si prefieren algo más trascendental, quédense con Aristóteles: la esperanza es el sueño del hombre despierto.
MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org
