21 de agosto de 2012

El cuento de nunca acabar

El proceso de inscripciones y el parto del calendario de la Liga EBA se está alargando más artificialmente que la saga de El planeta de los simios. El caso es que estamos a 21 de agosto de 2012 y todavía no tenemos noticias oficiales de qué pasa exactamente con el Grupo A de la Liga EBA. En la misma situación se encuentran los aficionados, jugadores, entrenadores y directivos de los grupos C y D, no así los afortunados protagonistas del Grupo B, que desde hace una semana cuentan con toda la información de la que nosotros no disponemos.

Recordemos que en las últimas horas ha sido la Federación Cántabra de Baloncesto la que ha adelantado un grupo de 23 escuadras. Entre ellas figurarían todas los preinscritas en la nota pública de la FEB, excepto el SAB Torrelavega, el CD La Paz y el filial del CB Valladolid (que se caería de la lista por segundo verano consecutivo). Si se confirmara esa relación de equipos y se mantuviera la distribución geográfica, nos encontraríamos con 11 conjuntos en el grupo gallego, 11 en el cántabro y el CB Tormes (Salamanca) aspirando a este último.


Otra de las cuestiones que tiene que aclarar la FEB es la modificación del sistema de competición. Con la desaparición del Grupo E (confirmada por el desvío de los conjuntos valencianos al B), se deberían redistribuir las plazas para las eliminatorias de ascenso, que presumiblemente pasarán de tres a cuatro. También podrían quedar determinados los cruces, así como las posiciones de descenso. Veremos qué valor tiene todo eso, con una más que probable (y necesaria) reestructuración a la vuelta de la esquina.

Perder la memoria

En cualquier caso, y pase lo que pase, no deberíamos olvidar todo lo que ha sucedido a lo largo del estío. La suma de despropósitos que ha acumulado la FEB ha sido de tal magnitud que haría bien en esconder la cabeza bajo tierra durante una larga temporada. Sería un buen momento, por ejemplo, para dejar de aplicar con la dureza habitual el código sancionador, que incluye un amplio catálogo de posibilidades, desde las bocinas hasta las equipaciones, pasando por los túneles de vestuarios (la especialidad de la casa). No lo veremos.

Y para demostrar la sensibilidad de la FEB con la situación económica de los clubes, qué mejor que aplicar los más 30 días de retraso que acumula en la publicación de los calendarios, por ejemplo, a las fechas de pago de los equipos. Seguro que la Comisión Delegada (con sus nueve federativos a la cabeza, en lugar de los cuatro que ordena el espíritu de los Estatutos) no tendría ningún problema en reunirse telemáticamente, si fuese necesario, para aprobarlo ipso facto, o como diría Sabina, en el mismo momento que ella me lo mande.


MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org