J8: de aterrizajes y despegues

A revertir la dinámica:  El CD Estela atraviesa una zona de turbulencias en pleno vuelo por la Liga EBA. Las cuatro derrotas consecutivas sufridas en el último mes de competición han provocado que el cuadro santanderino haya perdido altura en la tabla clasificatoria. Su piloto Joaquín Romano tendrá que ejecutar una complicada maniobra para levantar la nave sin el tripulante Juampe García y con la duda de un pasajero trascendente como Milos Martinovic. Su rival, el UPV de Álava, ha tenido la fortuna de abordar a los dos conjuntos de nuestra comunidad en su momento más dubitativo de la temporada. Hasta hace un par de semanas, los vitorianos no habían ganado nunca en tierras cántabras y de momento no lo han hecho en encuentro oficial contra el CD Estela (62-69 y 87-78). En el recuerdo queda la histórica remontada del 4 de febrero, cuando los santanderinos (con un descomunal 33-8) fueron capaces de voltear un 54-70 en el Palacio de Deportes (S 18:30).

Ha pasado lo peor:  Parece que sale el sol en el horizonte del Pas Piélagos. La victoria cosechada la semana pasada frente al colista de la categoría ha disipado los tormentosos nubarrones que encapotaban el cielo renedano. La siguiente consigna para los pielaguistas es consolidar las buenas sensaciones ofrecidas en los dos últimos compromisos para iniciar el despegue clasificatorio. Con esa misión acudirá este sábado a Burgos, donde le aguarda uno de los conjuntos más rocosos de la categoría, el Miguel Robleda. La escuadra dirigida por Miguel Ángel Segura se desenvuelve como pez en el agua en los encuentros ásperos, con un ritmo de juego pausado, porcentajes bajos y pérdidas de balón. Ese escenario no sería del todo desfavorable para los pielaguistas vistos los rivales y los resultados de esta misma temporada. Los burgaleses acumulan cinco prórrogas en poco más de un año; en una de ellas derrotaron por 87-85 a los azules. Fotografía | David Cuesta para el Pas Piélagos

MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org