Lobos resurrection

Más de dos meses después de que se anunciase la desaparición del CB Tizona (tras ¡¡¡tres!!! ascensos seguidos a la Liga ACB), un grupo de empresarios de Burgos ha expresado su intención de inscribir un club en la LEB Oro. Y como en todo esperpento de la historia reciente de nuestro deporte, da la casualidad de que existe un precedente con el sello del Cantabria Baloncesto. El 30 de julio de 2008, y después de que se oficiase su sepelio, el equipo cántabro resurgiría de sus cenizas y aceptaría la oportunidad de competir en la desaparecida LEB Bronce, junto con otras dos plazas históricas como Huelva y Girona. Con el retorno del mítico Quino Salvo, los albirrojos se proclamarían campeones de la categoría y certificarían el salto a la LEB Plata. Nunca se produjo: la sentencia de muerte se ejecutó tan solo unas semanas más tarde. La noticia del Alerta no tiene desperdicio (cambio de nombre de jugador incluido):

Imagen | ALERTA