8 de mayo de 2012

Los otros detalles

El baloncesto español estaba pidiendo a gritos una reestructuración de las categorías nacionales, no es ningún secreto. Pues bien, parece que esas ansias de cambio se han plasmado negro sobre blanco en un documento concreto. Eso sí, no deberíamos crear unas expectativas demasiado elevadas, porque la propuesta no parte directamente de la Española, sino de una federación autonómica; o al menos éso es lo que se desprende del título del documento, así como del escudo que figura en el membrete del mismo.

El borrador no es más que un power-point (ese invento que el diablo cargó de somnolencia), con sus clásicos bocadillos y esas flechas que apuntan hacia todos los puntos cardinales conocidos (¿hay algo menos didáctico?). Las diapositivas comienzan, sin embargo, con una interesante reflexión: ¿por qué cambiar? Y responde con tres aseveraciones que demuestran un buen grado de conocimiento de la realidad baloncestística española (lo traduciremos al román paladino por aquello de la economía del lenguaje):

  • porque las competiciones no tiene el nivel de prestigio de otras áreas FEB (palo)
  • por la escasa y decreciente demanda de plazas en las categorías FEB (palo)
  • para adaptarse a la realidad y las posibilidades económicas de los clubes (palo)

Oro, Plata y Bronce

A partir de este diagnóstico, la federación en cuestión desarrolla su propuesta para estructurar el baloncesto español. Como se ha comentado a través de diversos medios, la cúspide de la pirámide estaría formada por una LEB Oro de 16 equipos (aunque en la página 11 figuran 18); por debajo de ella, una LEB Plata constituida por tres grupos de 14 (en el norte coincidiría con los límites actuales del Grupo A de la Liga EBA); y finalmente una LEB Bronce que, a efectos prácticos, supondría lo siguiente:

  • en el norte, que los equipos de Primera División tendrían que reforzar a los actuales subgrupos de Liga EBA (A-A y A-B)
  • en el resto, que los equipos sobrantes de Liga EBA tendrían que reforzar a los actuales grupos de Primera División

¿Salen las cuentas?

Desde el punto de vista económico, la propuesta efectivamente pretende disminuir los costes para los equipos que se mantengan en LEB Plata: serían unos 100.000 euros menos de aval y 20.000 menos en la cuota de inscripción. Sin embargo, para los equipos que subiesen desde la actual Liga EBA (como los cuatro cántabros), el desembolso económico aumentaría: unos 3.000 euros más de aval y 24.000 más en el resto de conceptos (siempre según cálculos aproximados). Además, habría dos viajes más y los temidos tours a Galicia.

Finalmente, el aval se dividiría en dos, una parte fija (para garantizar los cobros federativos) y una parte variable (en función de la masa salarial de la plantilla). No hace falta ser muy avispado para imaginar la ingeniería financiera (por llamarla de manera eufemística) que desarrollarían los clubes para rebajar las cantidades a avalar; o la predisposición de la FEB para destinar mayores recursos a técnicos contables. En cualquier caso, no seamos demasiado exigentes, porque pedíamos movimientos y ya se están produciendo.


MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org