Jugada 1: Pasos de Álvaro Lombera (1h13'27")
Milan Jaros tapona la acción de Miguel Jenaro y saca el contrataque. El balón le llega en pista delantera a Álvaro Lombera, que bota, atrapa el balón en sus manos, se apoya en el pie izquierdo (primer apoyo), posteriormente en el derecho (segundo apoyo) y finalmente en el izquierdo (pasos). El jugador santanderino hubiera evitado la infracción si hubiese apoyado simultáneamente los dos últimos pies. ACIERTO (pincha aquí para ver la acción).
Jugada 2: Dobles de Alberto Miguel (1h20'19")
Alberto Miguel recibe el balón ante la defensa de Manu Díaz, el jugador torrelaveguense gira la mirada para ver la situación del bloqueo directo y el laredano aprovecha ese instante para cambiar de ritmo y marcharse de su adversario. El árbitro aprecia acompañamiento de balón y estima que se produce una ventaja. Las imágenes no resuelven el entuerto, ya que el balón está completamente tapado por el jugador. DUDOSO (picha aquí para ver la acción).
A partir de aquí, elucubraremos. Alberto Miguel se queda perplejo ante la decisión del árbitro y el banquillo visitante no hace siquiera amago de protesta. Este último dato es bastante significativo, ya que se presupone a los torrelaveguenses especialmente sensibilizados con este tipo de infracciones, no en vano la temporada pasada cayeron ante el Aurteneche Maquinaria por una señalización idéntica, que además fue la puntilla para el descenso.
Jugada 3: Posesión de Manu Díaz (1h20'45")
El ataque del SAB Torrelavega se resuelve con un tiro desesperado de Eloi Galofré que toca el aro y Manu Díaz atrapa el rebote, pero cuando se dispone a tirar, suena la posesión y el árbitro señala violación de 24 segundos. ERROR. A continuación rectifica y le otorga el ataque al equipo visitante. Si como parece, el colegiado detuvo el partido antes de que Manu Díaz lanzara, la decisión fue la correcta. ACIERTO (pincha aquí para ver la acción).
Jugada 4: Tiempo de Joaquín Romano (1h21'01")
En la misma jugada, Joaquín Romano pide tiempo muerto cuando observa que el árbitro ha pitado la infracción de 24 segundos. Una vez subsanado el error (posesión para el SAB), el entrenador local anula de manera inmediata el tiempo. El árbitro principal se dirige a la mesa y se lo concede en contra de su voluntad. Reglamento en mano, los tiempos muertos pueden anularse siempre que la mesa no los haya concedido. No parece el caso, pero es DUDOSO.
Dicho lo cual, si un entrenador toma una decisión a raíz de un error arbitral y los colegiados lo corrigen, parece razonable que el entrenador pueda dar marcha atrás en esa decisión. Negarse a ello, y más aún cuando se ha hecho en tiempo y forma, resulta abominable. El hecho de que los árbitros se equivoquen no ampara errores posteriores (como protestas, por ejemplo), pero tampoco puede ser la excusa para alterar el normal desarrollo del juego.
MARIO TAMAYO CASTAÑEDA | www.algosemueve.org