19 de noviembre de 2013

El primer derbi

El primer derbi en la historia del baloncesto cántabro en la Liga EBA tuvo lugar un 20 de diciembre de 1998. En aquella ocasión (como en las tres posteriores), se enfrentaban el filial del Cantabria Lobos (que por aquel entonces militaba en la Liga ACB) y el Canteras La Verde, nombre con el se conocía comercialmente al CD Calasanz. El ambiente que rodeó el encuentro no fue precisamente el más distendido, porque unos meses antes, los dos clubes habían mantenido una dura pugna por la titularidad de los derechos en la Liga EBA. El equipo santanderino (tercero en la fase de ascenso comentada hace unas semanas) tuvo que esperar a la existencia de vacantes para salir en la Liga EBA, una competición a la que se había hecho acreedor deportivamente, pero que las instancias federativas consideraron que le correspondía al club de Ciriaco Díaz Porras.

Dos conjuntos en apuros

El encuentro adquirió unos tintes dramáticos por la delicada situación clasificatoria que atravesaban los dos equipos. El mal arranque liguero incluso le había costado el puesto al entrenador del conjunto verde (David Cebrián), destituido tras la undécima jornada y curiosamente reemplazado por uno de sus jugadores (Javier Durántez). En la escuadra local las operaciones las dirigía Joaquín Romano, y en las nóminas de los dos conjuntos figuraban dos hombres que habían pasado por las canteras del FC Barcelona y del Real Madrid: César Sañudo y David Iglesias. No obstante, no fueron ellos los protagonistas del encuentro que se disputó sobre el suelo sintético de La Albericia, sino dos tiradores acreditados como Alberto Miguel (20 puntos) y José Manuel Basurto (28).

El Canteras La Verde dominó en el marcador desde el inicio (12-22) y manejó en todo momento diferencias que rondaron la barrera psicológica de los diez puntos. El escolta asturiano (a pesar de lo que pudiera parecer por su apellido) David Bruck se convirtió en la principal referencia del Lobos Santander, pero su aportación ofensiva (17 puntos) no se vio acompañada por la de ninguno de sus compañeros. Los visitantes acabaron imponiendo su velocidad y su juego de perímetro y vencieron por catorce de diferencia a su vecino santanderino (72-86), saldando de esta manera las cuentas pendientes por el affaire veraniego. El Lobos se hundía en el farolillo rojo de la clasificación mientras su rival sacaba poco a poco el pescuezo del agua.


Cantabria Baloncesto B 72-86 CD Calasanz
Parciales: 12-22, 32-42, 48-58 y 72-86.
Cantabria Baloncesto B: Paco Aurioles (9), David Bruck (17), David Gómez (7), Nacho Pérez (10) y Jorge León (11), Banquillo: César Sañudo (8), Eduardo Argos (0), Santi Barreras (0), David García Peña (10) y Jose Muñoz (0). Entrenador: Joaquín Romano.
CD Calasanz: Alberto Miguel (20), Eduardo Pérez (11), José Manuel Basurto (28), Óscar Cavada (9) y Jaime Gándara (1). Banquillo: Tato Cabrero (10), Germán Gómez (0), Chus Barquín (0), Ángel García (5), David Iglesias (2) y Paco Zaballos (0). Entrenador: Javier Durántez.
Pabellón de La Albericia (Santander).




www.jugon.net | 10 de diciembre de 2008