2 de junio de 1999
A lo largo de los 25 años, pocos actos han reunido la emotividad y el profundo respeto que se respiraron en el coliseo torrelaveguense durante la interpretación de La Marsellesa. El himno nacional francés, coreado por jugadores de la talla de Antoine Rigadeau y Tariq Abdul-Wahad, fue el memorable preludio del segundo encuentro de la selección española en Cantabria, de nuevo con victoria (91-81). No fue el último, porque tres años después la capital del Besaya albergaría los dos últimos duelos de preparación para el Mundobasket de Indianápolis (en 2002), ante Croacia (76-63) y Australia (83-89).
Imagen | El Diario Montañés